Triatlón Querétaro 16

viernes, 6 de septiembre de 2013

Entrenando en la Caminadora

Cada vez es más frecuente escuchar que algún compañero maratoniano complementa sus kilómetros corriendo en una caminadora. En los gyms es muy común ver gente corriendo en las caminadoras y cada vez más estos aparatos se están volviendo parte del equipo de entrenamiento de rutina de muchos corredores y triatletas. Caminadora, Banda, Treadmill o como sea que la queramos llamar, esta maquinita puede llegar a ser un excelente auxiliar en nuestros entrenamientos diarios.
Algunos corredores no son partidarios de entrenar en caminadora. Comentan desde que es aburrido, que no es exactamente lo mismo que un entrenamiento "verdadero" en la pista o en el trail, que correr en banda puede ser hasta claustrofóbico, que las caminadoras son caras y consumen muchísima energía y varias desventajas adicionales. Todos estos problemas pueden ser perfectamente válidos para muchos, pero hoy les voy a hablar  de las ventajas -solamente- que ofrece este tipo de equipos, que son muchas y muy importantes.
La primera ventaja es que la caminadora nos ofrece la posibilidad de hacer una porción importante de nuestro kilometraje sin salir de casa, cuando nos fué imposible salir a correr a la pista o al parque, ya sea por la hora, la lluvia, el clima extremoso o cualquier otra razón. Si contamos con una caminadora en casa, es sumamente conveniente simple y sencillamente ponerse los arreos y correr bajo techo al ritmo y la distancia que queramos. En mi caso, que estoy sujeto a agendas diarias sumamente cargadas y muchas veces poco predecibles, la utilizo gran parte de los días entre semana, cuando llego a casa ya demasiado tarde o salgo demasiado temprano para pensar en salir a la pista. En el lugar donde vivo, llueve intensamente y prácticamente todos los días desde Mayo hasta Octubre y poder correr bajo techo, a salvo de la lluvia, es sumamente conveniente. Tengo una buena TV casi enfrente de la caminadora, por si me apetece ver el video de alguna competencia atlética, triatlón o partido de fut mientras corro y un equipo de audio para escuchar música sin tener que correr con los audífonos molestándome los oídos.



Hacer series de velocidad en la caminadora es algo que también me encanta. A diferencia de cuando uno corre en la pista, la caminadora nos ofrece la posibilidad de correr exactamente al ritmo programado tanto los intervalos como los tramos de recuperación. Hay equipos que incluso ofrecen facilidades para programar la sesión de velocidad, con el número y longitud de repeticiones que se desean hacer, al ritmo programado y con los tramos de recuperación requeridos. Mi caminadora no es de tan alta gama, pero manualmente puedo controlar perfectamente a qué ritmo deseo correr mis intervalos y tramos de recuperación.
Lo mismo sucede con el entrenamiento en cuestas. Si la caminadora tiene la facilidad de variar su inclinación con el toque de un botón, como lo son la mayoría de los equipos hoy en día, se puede simular el entrenamiento en subidas de manera muy exacta. Se puede correr con la pendiente deseada o programada, variando en el momento adecuado la inclinación. Esto tiene la grandísima ventaja de que se puede correr con pendiente solamente hacia arriba, evitando los tramos de bajada y el efecto de un mayor impacto en piernas que normalmente se tiene al correr con pendiente negativa.
Adicionalmente, una buena caminadora tiene la ventaja de que el impacto natural en las piernas resultante de la carrera es menor, pues la mayoría cuenta con sistemas de amortiguación que en mayor o menor grado disminuyen el daño producido por el golpeteo natural de la carrera. 
Se dice que correr en una caminadora requiere menos esfuerzo que correr en exteriores, debido a que no se tiene que vencer la resistencia del aire que se tiene al correr en ruta, por lo que se dice que es conveniente que siempre se corra con una pendiente del +2% para igualar el esfuerzo que implica correr en escenarios naturales. Pero esto no considera que al correr en una caminadora no se tiene el efecto de inercia, pues aunque las piernas se muevan, el cuerpo permanece en el mismo lugar y ello hace que el empuje que se tiene que ejercer sobre la banda para mantenerse en su misma velocidad, sea mayor. Esto hace que se compensen ambos efectos (No Resistencia del viento y No Inercia), por lo que yo sostengo que correr en una caminadora es exactamente equivalente, en cuanto a nivel de esfuerzo requerido, que correr en forma natural en exteriores. Así que si se acostumbra correr en una caminadora siempre con un 2% de pendiente hacia arriba, será más difícil que correr afuera y se tendrá un beneficio adicional.
Hoy por hoy existe una amplísima gama de caminadoras, desde las muy simples y baratas hasta las muy sofisticadas y de alto costo con infinidad de facilidades, programas precargados, opción de simular rutas en cualquier parte del mundo vía google maps, etc. Sin embargo, una caminadora básica, pero con lo mínimo necesario para entrenar seriamente, como podrían ser controles digitales de velocidad e inclinación, es cada vez más accesible y con precios cada vez más bajos.



En general, mi experiencia entrenando alternadamente en exteriores y en la caminadora ha sido muy positiva. He tenido desempeños sobresalientes para mi nivel en Maratón, con programas de entrenamiento que han hecho énfasis en la carrera en banda. No necesariamente quienes lean esta entrada estarán de acuerdo con las ventajas de las caminadoras, pero aún así, me atrevo a recomendar ampliamente su uso.

6 comentarios:

  1. La caminadora, igual que otras inovaciones alternativas, puede funcionar de manera muy eficiente si se le sabe sacar provecho. Por una parte no se podrá disfrutar de los paisajes o las calles donde nos gusta correr, pero obtienes la comodidad de hacerlo en un lugar donde los factores ambientales no importan.
    He sabido de corredores que llevan toda su preparación para un Maratón en una caminadora y ni un solo kilómetro en exterior.
    Saludos!

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  2. Mismo idioma pero diferentes palabras ,-) aquí se llama cinta de correr y la verdad es que no está mal vista. Aquí donde vivo hay días de invierno que se hace muy dificil salir o lo mismo en verano y para esos días viene genial.

    Yo la utilizao de vez en cuando, antes más....lo que pasa es que se me hace muy aburrido correr ahí y eso que hay teles delante y te puedes entretener.

    Conozco varios que son muy muy buenos corriendo que utilizan la cinta de forma habitual en sus entrenos.

    A mi me encantaría tener una en casa pero es imposible, no tenemos sitio y mi mujer me pondría las maletas en la puerta jeje

    Un saludo

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  3. Yo estuve una temporada entrenando en una porque no tenía otra cosa , estaba embarcado y era lo que habia , se me hacia eterno y casi la lleguer a odiar , como a mi suegra , un saludo, maquina , a ti amigo!!

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  4. Yo literalmente no sé correr en cinta, me mareo. De todos modos en Canarias no tiene mucho sentido;)

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  5. que marca y modelo de caminadora tienes

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  6. Genial! la usaré más. Por mi parte tuve mala experiencia alguna vez, pues me limitaba a la caminadora y el día que salí a sabiendas que lograba hacer ya mis primeros 7 km., hace 6 años, logré comprobar que en la calle solo pude hacer 3km, hasta que logré sentir el mismo ritmo de la banda en comparación con la calle y fue que por fin pude ver el beneficio, no fue la banda, fui yo.
    Me interesa usarla en series, pues a veces también se complica la lluvia, el horario y el lugar, lo intentaré próximamente.

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